miércoles, 24 de octubre de 2012

Algunas observaciones sobre genética y herencia

En primer lugar un par de consejos para evitar una mala interpretación de las explicaciones:
-Escuchar al profesor atentamente.
-En caso de duda, preguntar al profesor para comprobar que lo que uno cree que ha entendido es efectivamente lo que el profesor ha dicho.

Para empezar no se debe confundir la expresión "color de ojos de los padres" con las expresiones "gen (para el color de ojos) heredado de los padres" o "alelo (para el color de ojos) heredado de la madre o del padre": la primera expresión se refiere al fenotipo, mientras que la segunda y la tercera se refieren al genotipo. Y como veremos ésta es una importante diferencia.

Los seres humanos tenemos 46 cromosomas: 23 se heredan del padre (mediante el espermatozoide) y 23 de la madre (a través del óvulo). Es decir, cada uno de los padres tiene dos juegos completos de genes (23+23), y la descendencia recibe un gen para cada rasgo de cada uno de los padres. La ley que nos interesa afirma que "el rasgo recesivo se expresa sólo si ambos genes (alelos) son recesivos". Por tanto, si se considera que el rasgo "ojos claros" es recesivo, para que el descendiente tenga los ojos claros, tanto el alelo del padre como el de la madre deben ser recesivos, es decir que ambos deben ser, formulado de forma coloquial, "genes para ojos claros".
Dicho de forma simple y aproximada, al menos uno de los 23 cromosomas del padre contiene, por ejemplo, información sobre el color de ojos, y al menos uno de los cromosomas de la madre también contiene información sobre el color de ojos. Esos son genes alelos, si la información genética coincide (es decir, los dos alelos  -el del padre y el de la madre- de un mismo locus son iguales) se llaman homocigóticos, si son diferentes son heterocigóticos. La información genética que un organismo, en este caso un niño/a, recibe de sus progenitores constituye el genotipo. Pero una cosa es la información genética contenida en los cromosomas y otra cómo se manifiesta o expresa esta información. La relación entre el genotipo y su manifestación (fenotipo) se explica entre otras cosas por la distinción entre rasgos recesivos y dominantes. Si un alelo es recesivo y otro dominante el rasgo que se manifiesta en el fenotipo será el dominante. El recesivo permanece en el genoma, formando parte del genotipo, y puede ser transmitido a la descendencia, pero no se manifiesta en este caso (una persona puede tener genes recesivos sin saberlo). Por tanto, para que el rasgo recesivo se manifieste ambos alelos deben codificar el rasgo recesivo. Por ejemplo, si representamos el carácter dominante con la letra mayúcula "A" y el recesivo con la letra minúscula "a", tenemos tres combinaciones posibles "Aa" (o "aA"), "AA", "aa", solamente en el tercer caso el carácter manifestado en el fenotipo será el carácter recesivo. En nuestro ejemplo, los ojos oscuros son dominantes con respecto a los ojos claros, por tanto si representamos los ojos oscuros como "A" y los claros como "a", solo la combinación "aa" dará como resultado, en principio, que el niño tenga los ojos claros.
Siguiendo con nuestro ejemplo propongo un sencillo ejercicio: Supongamos que en una pareja el padre tiene los ojos claros y la madre los ojos marrones ¿de qué color serán los ojos del niño/a?
Te recuerdo que si el padre tiene los ojos claros (por ejemplo, azules), sabemos que sus alelos son "aa", es decir, que tanto el gen heredado de su padre como el gen heredado de su madre codifican "ojos azules". Sin embargo, en el caso de la madre la combinación de alelos puede ser tanto "Aa" (o "aA") como "AA".